La provincia del Chubut presenta tres regiones climáticas bien diferenciadas: Oriental representada por el sector de los Andes, la zona Central (zona de mesetas y terrazas) y la Occidental. Camarones se localiza en el sector occidental que dispone un importante paisaje de mesetas que domina sobre el resto de las geoformas. Las mesetas son el producto, como se ha desarrollado anteriormente, de una intensa peneplanización previa al derrame de lavas, las que conservaron la antigua planicie para que la erosión no las modele y desaparezcan. El relieve mesetiforme muestra en su superficie extensas zonas llanas, con suaves inclinaciones hacia el oriente, drenando los escurrimientos superficiales hacia el océano Atlántico. Las características litológicas de lo geomorfológico esté repetido en gran parte de la Patagonia Extra-andina. Las características litológicas de los Rodados Patagónicos le permiten que este fenómeno geomorfológico esté repetido en gran parte de la Patagonia Extra-andina.
Respecto a las condiciones climáticas, el sector oriental de régimen marino (zona donde se localiza Camarones) presenta un clima templado- frío semiárido. Se encuentra influenciado por la presencia del océano Atlántico y por tanto la amplitud térmica es algo menor que en zonas continentales. Se registran precipitaciones escasas, alcanzando unos 200 mm anuales con ausencia de nieve, grandes amplitudes térmicas diarias, con una temperatura media anual que oscila entre 12 y 14°C. El balance hídrico es deficitario. . Las lluvias disminuyen hacía el este y los vientos del oeste son fuertes y constantes, fenómeno que erosiona los suelos e impide el crecimiento de la vegetación. Así, predominan en el área vientos del cuadrante oeste durante todo el año, siendo su intensidad máxima en los meses de verano alcanzando valores cercanos a 30 km/h. Se observa la ocurrencia a lo largo del año de vientos fuertes que superan los 43 km/h registrándose ráfagas muy intensas que superan 120 km/h especialmente durante la primavera. Los suelos son de textura media a gruesa, pobres en materia orgánica, calcáreas en profundidad y levemente salinas. Esto genera que las condiciones no sean aptas para el uso agrícola, aunque si para las actividades pecuarias. La cría de ganado ovino para la producción de lana es la actividad tradicional que, históricamente, se ha extendido no solo en los alrededores de Camarones, sino en la parte central y occidental de la provincia. Dicha actividad se concreta en unidades económicas conocidas como estancias que ocupan grandes extensiones de tierras y su conformación se vincula a los procesos de ocupación y colonización de tierras de la Patagonia.
En las mesetas, la vegetación está constituida por coirón de huecú, coirón dulce, poa ligularis, coirones amar-gos y llama, acompañadas en algunos sitios por un estrato arbustivo de mamuel choique, mata torcida y charcao. En las laderas de las mesetas y cañadones la vegetación arbustiva es densa y las especies dominantes son trevoa patagónica, coliguay y tomillo en las partes altas y llaollín, mata dulce, zampa y aletocarpa en las proximidades del mar. El estrato herbáceo está dominado por los coirones amargos y llama acompañados por sereneaei y tenuis, poas, cerastium arvense y alfilerillo. También se encuentran con relativa frecuencia los prosopis (alpataco).
En las cabeceras y cursos intermedios de los cañadones que bajan al mar la vegetación es similar a la de mallín, con coirones dulces en los bordes y hordeum parodii, pratia repens, carex subantártica, junco, acaena magallánica en las partes más húmedas. Las principales especies forrajeras son el coirón dulce, los del género stipa, poa y el alfilerillo (en años buenos) complementadas con arbustivas: llaollín y mata dulce. Respecto a la fauna, en la zona de meseta es común encontrar guanacos, peludos maras, tucu-tucus, cuises; mientras que en el área costera son comunes las especies ya mencionadas con la descripción del Parque Marino Costero: gaviota de Orlog y el pato vapor de cabeza blanca, pingüino de Magallanes, el cormorán imperial, el cormorán de cuello negro, el petrel gigante del sur, el gaviotín sudamericano, el gaviotín pico amarillo, el gaviotín real, lobo marino de un pelo y lobo marino de dos pelos.
Tanto el estado de la flora y la fauna presentan un buen estado de conservación debido, en parte, a la presencia del área que delimitada con el estatus de reserva natural, aunque por fuera de esta zona, la escasa población de la localidad y del departamento junto al uso extensivo de las tierras destinado, en gran medida, a la cría de ganado ovino, generan que las condiciones naturales exhiban un buen estado de conservación.
No hay cursos de agua importantes que atraviesen el tejido urbano ni que se encuentren en los alrededores. Solo escurren algunos pequeños arroyos temporarios que dependen en gran medida del régimen de lluvias anuales. Lo mismo sucede con algunos cuerpos de agua (pequeñas lagunas) temporales originadas por algunas lluvias. Por otro lado, el mar Argentino conforma una fuente de recursos pesqueros donde predomina la pesca comercial del salmón, al tiempo que la zona costera es utilizada por muchas personas (oriundos y foráneos) con fines recreativos, o para pescar deportivamente. Esto sucede en gran medida durante la época estival.
La actividad minera o extractiva no tiene presencia en la zona analizada.
Comportamiento humano
Tal como se mencionó, la escasa población (urbana y rural), el tipo de uso del suelo (destinado a la ganadería extensiva) y la ausencia de otras actividades productivas y/o extractivas generan condiciones relativamente favorables para la reproducción de los diferentes recursos naturales. En otras palabras, no se observan grandes problemas medioambientales, ni problemáticas específicas vinculadas al deterioro, degradación o agotamiento de los recursos y esto, en gran parte se debe al tamaño poblacional de la localidad y el volumen de las actividades económicas. Por ejemplo, el funcionamiento de la planta urbana requiere y tiene un basural, el cual es a cielo abierto (se localiza a 2 km del casco urbano) donde se queman los residuos sólidos; y si bien ésta modalidad es nociva para el medio ambiente, no alcanza el volumen necesario para ser valorizada como un problema que afecte en gran medida a la población o al medio. Con la actividad pesquera comercial ocurre algo similar: si bien se desarrolla la actividad sin ningún tipo de control respecto al tipo de modalidad y prácticas de extracción, el poco volumen de pesca no llega a ser suficiente como para que adquiera el estatus de problema en función del agotamiento del recurso.
Tratamiento de la basura
Tal como se mencionó en el párrafo anterior, el pueblo cuenta con un basural a cielo abierto ubicado a 2 km de distancia del tejido urbano, donde los residuos sólidos son quemados. Asimismo, la localidad cuenta con un servicio de recolección de basura que se efectúa tres días a la semana.
Desasatres naturales
No tiene presencia material ni simbólica algún tipo de proceso o evento asociado a la condición de desastre natural. El único evento que recordó el guardafauna de Cabo dos Bahías fue el derrame de petróleo que ocurrió en la década de 1990 en el mar Argentino y que afecto en especial a las aves marinas.
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