ENTORNO

San Francisco del Monte de Oro se encuentra situada a 120 km de la capital provincial y es la cabecera del partido de Ayacucho al que también pertenece Alem. La relación entre ambas ciudades es fluida por el comercio, la administración y la salud de la que Alem depende.

Esta localidad es rica en historia y geografía. Divida en dos bandas (sur y norte) se puede percibir que por sus organizaciones y participación existe una incipiente cohesión social en torno a los temas de interés, realizando actividades sociales de inclusión por medios de sus referentes sociales de la zona, potenciado por la ausencia o la falta de sinergia de instituciones y mecanismos intermedios que puedan mediar entre el colectivo de ciudadanos y las agencias de gobierno. Esta relación directa con las altas esferas del poder local genera concientización y politización de estos colectivos que intentan nuclearse y organizarse. El caso más claro es la participación activa de la población para resolver los conflictos que hay en el hospital municipal y que abastece a toda la zona.

Esta cohesión social abarca a los nuevos flujos migratorios, aunque subsisten conflictos entre los distintos actores: los mismos pobladores que emigran y retornan “migrantes nativos” (agentes de cambio impulsados por un fuerte localismo), los lugareños permanentes y de los nuevos migrantes que provienen de los centros urbanos con nuevas formas de integración, como son los ecopueblos;  que se sitúan en lugares como río Gómez con la intención de llevar adelante un estilo de vida autosustentable, vegano, con energías renovables y construcciones de permacultura. Con estos últimos se ponen en contrapunto distintos conceptos de progreso y de acceso a los servicios públicos, es decir, entre quienes quieren y pueden prescindir de ellos.

En la banda norte podemos encontrar la plaza Pringles, la iglesia moderna y el centro urbano de la ciudad que cuenta con un banco (Supervielle), centros culturales, los bomberos, el hospital zonal y las dependencias administrativas y policiales.

San Francisco fue un centro comercial que nucleaba la zona, con el camino nuevo denominado ruta nacional Nro. 146 queda a 9 km de la principal fuente de comunicación entre las localidades de la zona, abandonando su ubicación estratégica.

Reconocida nacionalmente por ser un centro de magisterio donde emigraron todos los docentes de la zona, actualmente sólo cuenta con un secundario que ofrecía el título de agente sanitario y ahora el de bromatología y técnico en salud y medio ambiente.

La banda sur es el sector más antiguo de la ciudad. Allí se encuentra la historia de San Francisco, sus tradiciones y cultura: la iglesia de San Francisco de Asís que data de principios de siglo XIX, la escuela rancho, primera escuela creada por Domingo Sarmiento, el museo de Rosenda Quiroga, la primer maestra de la región y la antigua plaza que aún guarda los restos de las horcas donde se exterminaban a los naturales de la zona.

Primer negocio de ramos generales, ubicado frente a la Plaza Puerta, en honor a la familia Puerta, antiguos comerciantes de la zona. Su dueño era Don Próspero

Siguiendo por el camino de la banda sur, podemos acceder el mayor atractivo turístico que tiene San Francisco, el dique Las Palmeras. Más adelante se puede encontrar el Salto Escondido, fascinante cascada de casi 70 m de altura; las minas y canteras distribuidas en su territorio; los magníficos yacimientos de arte rupestre como el Rodeo de Cadenas y el denominado Piedra del Santo; y los mágicos balnearios naturales[1].

San Francisco cuenta con las hosterías La Rosa de los Vientos, Pérgola de la Flor, hotel Dique las Palmeras, hotel Martín, por nombrar sólo algunas.

Entrada de la hostería La Rosa de los Vientos

El Barrial está ubicado detrás del dique Las Palmeras al que se accede por la banda sur de San Francisco del Monte de Oro. Esta zona tiene unos paisajes imponentes y una tupida vegetación.

 

En El Barrial se encuentre el artesano Pete Leyes quien tiene un vasto conocimiento de las culturas aborígenes que habitaron la zona. Asimismo posee una gran colección de sus morteros, vasijas, momias y armas que fue recolectando en el valle y que expuso en pocas ocasiones en el centro de San Francisco. por temor a que estas piezas, que son patrimonio cultural del pueblo, sean enviadas a otros museos, Pete decidió devolverlas a las tierras “que son de donde pertenecen” a la espera de poder concretar su sueño: crear un museo arqueológico en lo alto de la montaña, donde fue antiguamente un asentamiento de los pueblos originarios que habitaron la región. 

La Carolina es un antiguo pueblo situado a los 2.000 metros de altura en el centro de las sierras. A causa de la abundante extracción de oro durante el virreinato, este asentamiento de mineros se fue construyendo como una localidad. Si bien ya no se sigue explotando el oro, se conserva su extracción tradicional para el turismo.

Asimismo se encuentra el Museo de la Poesía en honor al gran poeta autóctono Juan Crisóstomo Lafinur y hermosos paisajes que muestran el inicio de los cauces de los ríos que desembocan en el valle.

Alem y San Francisco del Monte de Oro tienen una larga relación no sólo producto de la dependencia administrativa, por ser esta ciudad cabecera del partido de Ayacucho, a dónde asisten por la atención de la salud, el comercio y el sistema educativo de en sus modalidades media y superior, sino porque existen entre ambas localidades fuertes lazos sanguíneos y un pasado histórico en común. De esta manera, muchas personas que crecieron en Alem, migraron a San Francisco, conservando allí parte de su familia y su vínculo con el pueblo; o bien, porque trabajan allí pero viven en la ciudad.

[1] Fuente: http://www.intertournet.com.ar/sanluis/leandro_n_alem.htm