ATRACTIVOS
En el período de 1997 a 2007, Amaicha del Valle y la zona comenzaron a posicionarse e integrarse a los circuitos turísticos del sur de los valles calchaquíes, donde se integra al gran circuito que ofrecen las provincias de Tucumán, Catamarca y Salta. Se trata de una situación claramente favorable para Ampimpa que podría sumarse, a partir de un proyecto turístico que la sumara a un importante circuito ya existente.
Ampimpa cuenta con un paisaje privilegiado, ya que desde allí puede observarse una vista panorámica del Valle de Santa María. El pueblo está rodeado de pintorescos cerros y a sendos lados de la ruta se observan las casitas, en su mayoría de adobe y material, la imponente iglesia, la escuela, algunos puestitos de venta de artesanías o productos regionales entre enormes cardones, chañares y algarrobos. Ademas del imponente paisaje y un clima privilegiado, actualmente la zona es reconocida por la producción y venta de artesanías como tapices y mantas hechos en telar, quesos, nueces confitadas, frutos secos y vinos pateros. Y son cada vez más concurridas sus fiestas tradicionales como el carnaval, el encuentro de copleras y la fiesta de la Pachamama.
El pueblo está ubicado a 2560 metros sobre el nivel del mar, su bello paisaje se encuentra enmarcado por vistosos cerros que junto a grandes cardones y algarrobos, recortan el cielo incansablemente azul de estos históricos valles. Ampimpa es denominada “el balcón de los Valles”, ya que desde allí puede apreciarse una vista privilegiada de todo el Valle de Santa María.
Ampimpa, ruta provincial Nro. 307
Sitios de interés
En el Km 107 de la ruta Nro. 307, a 2600 metros de altura se encuentra el famoso Observatorio Astronómico de Ampimpa. El Observatorio fue fundado en 1985 para estudiar el paso del cometa Halley. Se encuentra emplazado en un balcón natural al valle de Santa María, enfrentando a las sierras de Quilmes o del Cajón, y mirando a las provincias de Tucumán, Salta y Catamarca.
Debido a la geografía del lugar se pude observar un cielo diáfano, en forma casi permanente, sin polución ambiental ni contaminación lumínica. Es el único en su tipo en la región del Noroeste Argentino. Actualmente se desarrollan actividades educativas como campamentos científicos y ha sido declarado de interés cultural a nivel nacional.
Represa de Ampimpa: allí se almacena el agua de deshielo proveniente del cerro, que luego será distribuida por medio de acequias a los vecinos. Se accede por un pintoresco sendero entre cardones y algarrobos. Es un mirador natural del Valle Calchaquí, desde allí se puede disfrutar de una hermosa vista panorámica enmarcada por los cerros.
Feria Artesanal: ubicada junto a la hostería exhibe y vende productos de los artesanos de Ampimpa.
El Dique Los Cardones (17 km de Amaicha): muy atractivo para los aficionados a la pesca deportiva, se pescan truchas arco iris.
La Aguadita: donde hay una represa, pesca deportiva y camping (1 km de Amaicha).
Los Zazos: pequeño pueblo donde se producen artesanías y vinos pateros.(4 km de Amaicha)
El Remate: hermosa quebrada con pintorescas cascadas donde nace el río Amaicha.
Complejo de museos Pachamama: a 6 km de Ampimpa, en la entrada de Amaicha del valle, por la RP Nro. 307 se encuentra el Museo de la Pachamama, el cual ocupa 1 hectárea con 3.000 m cubiertos, allí se ven reproducciones y objetos que datan del 800 a. C. Hay salas de Geología, Antropología, Arte Textil y Pintura. Es obra del artesano, escultor y empresario Héctor Cruz. Es un Museo privado.
Ruinas de los Quilmes: A 24,6 km al noroeste por RP 357, luego ruta 40 y nuevamente RP 357. Las ruinas de Quilmes representan el último bastión de resistencia indígena contra la conquista realista
Cooperativa La Pachamama Ltda.: el local de exhibición y ventas de artesanía regional está ubicado en la esquina noroeste de la plaza principal de Amaicha del Valle.
Iglesia Sagrado Corazón: la única del pueblo. Es una imponente construcción recientemente terminada.
Iglesia Sagrado Corazón
En cuanto al alojamiento, en el pueblo hay una única posada (Posada Uno) en el km 111 de la ruta provincial Nro. 307, muy confortable y muy bien atendida por sus dueños. Cuenta con todos los servicios, internet, cable y pileta. La otra opción para el visitante es el alquiler de casas o cabañas.
Respecto de los eventos, en Ampimpa es tradicional la Fiesta de la Pre-Pachamama, en el mes de febrero-marzo, previamente a la fiesta de la Pachamama, se realiza la preselección de artistas, además se elige a la Ñusta, la joven símbolo de fertilidad, que forma parte del séquito de la Pachamama.
La fiesta de la Pachamama se realiza en Amaicha y coincide con la fiesta del Carnaval que se realiza en la vecina localidad de Los Zazos. Esta fiesta es una de las más tradicionales del norte argentino, reúne a miles de personas, los festejos duran una semana y allí se realizan recitales de grupos folklóricos, los tradicionales cantos de las copleras, degustación de platos tradicionales, vinos pateros, feria artesanal y el último día se elige entre las mujeres más ancianas a la “Pachamama” quien según la tradición recibe su legado y la representa hasta el año siguiente.
Personajes
Doña Rosa Martínez tiene dos trencitas blancas y unos ojos pícaros, mientras se sienta en su sillita de madera y tiento nos cuenta su historia. Tiene 75 años y nació en los Colorados, cerquita de Ampimpa. Se casó con Don Vargas y vivieron un tiempo en los cerros cuidando hacienda hasta que se instalaron en Ampimpa para que sus hijos puedan ir a la escuela. Recuerda que la antigua escuelita funcionaba en la casa de Don Simeón Avalos. Si se le pregunta qué cosas le gustan, ella contesta sonriente: “me gusta cantar, bailar, beber y golpear el cuero (cantar coplas tocando la caja) y los changos que abunden y que florezcan, que esas flores aún no se cosechan!!”.
Doña Rosa es coplera y se nota en su manera de contar las cosas. Ella dice que no aprendió de nadie a cantar, que es algo que surge, “de repente brota una letra y uno la va trabajando, le va dando forma, la va estudiando y luego se junta con otra coplera y le comenta su copla para que la oriente y así va naciendo la copla”. En la zona de Amaicha las copleras son parte de la identidad del lugar, una vez al año se reúnen las copleras de toda la zona, bajan de los cerros o vienen de los pueblos cercanos para hacer oír sus coplas acompañadas solo por el latido de sus cajas. Doña Rosa dice que cuando comenzó no tenía nada, entonces sus amigas copleras le prestaron una el sombrero, otra el poncho, otra un vestido, otra la caja, y así fue como se animó a cantar. Cantó durante doce años pero desde 2011 ya no canta más. Dice que ya se le fue la alegría y con ella las ganas de cantar. Desde una sillita de madera y tiento su nieta la mira con enormes ojos pícaros. Y entonces la duda: ¿surgirán en ella las coplas como le sucedió a su abuela?
Doña Rosa Martínez y su nieta
Historias y leyendas
Hay varios mitos y leyendas en el norte argentino que aún siguen transmitiéndose de generación en generación, en muchos pueblos aún se cuentan historias sobre la Salamanca y los duendes.
La Salamanca: en Ampimpa hay varias personas que aseguran haberla visto u oído en un barranco cercano. Es un lugar, (por lo general en cuevas en cerros o quebradas) donde por las noches se escucha música y un gran alboroto, se ven luces y gente danzando, parece una gran fiesta. La leyenda dice que la persona que entra vende su alma al diablo.
Los duendes: varias personas los han visto en el campo, cerros y quebradas. Doña Rosa Martinez cuenta que se ha cruzado con varios, en el campo y jugando en la acequia. Son como un niño pequeño, traviesos, con un gran sombrero muy copudo y lustroso, por lo general se escapan o esconden cuando alguien los ve. Algunas personas dicen que son las almas de los niños no bautizados y que algunas noches se los escucha llorar.
Patrimonio cultural
El pueblo de Ampimpa cuenta con un rico patrimonio arqueológico, suele encontrarse en superficie, restos de cerámica pertenecientes a urnas funerarias, morteros de piedra, etc. También hay numerosos petroglifos con imágenes características de las antiguas culturas del lugar. Lamentablemente aún no hay una política de preservación y varios sitios han sido saqueados y/o destruidos.