La historia de Ramón Biaus comienza en 1906, con el inicio de la construcción del tramo ferroviario y su estación. Esta obra estuvo a cargo de la Compañía General de Ferrocarriles de la Provincia de Buenos Aires, empresa inglesa, línea General Belgrano, trocha angosta, que comunicaba a Buenos Aires con el pueblo. Dicha construcción se llevó a cabo gracias a la donación de las tierras que realizó Arturo L. Patrón, fundador del pueblo y pariente directo de la familia Biaus1. El 15 de marzo de 1909 fue inaugurada la estación ferroviaria y fundado el pueblo con el nombre Ramón Biaus, en homenaje a sus antepasados.
En el campo se realizaban la siembra de cereales y cría de ganado bovino. Asimismo, una gran parte de la población se dedicaba a actividades complementarias, como por ejemplo tareas de secado y embolsado de cereal durante la época de finalización de la cosecha, en el verano. A esta época le seguían los tiempos de cosecha de maíz. Como la recolección de este cereal se llevaba a cabo en forma manual, requería gran cantidad de mano obra.En el campo se realizaban la siembra de cereales y cría de ganado bovino. Asimismo, una gran parte de la población se dedicaba a actividades complementarias, como por ejemplo tareas de secado y
A su vez, Rodolfo Gosto -un hombre mayor que transcurrió su niñez en Biaus- recuerda las inmensas porciones de terrenos cubiertos por frutillares, trabajados por distintas familias para consumo personal y comercialización en ciudades cercanas. Muchos de ellos vendían las frutas, verduras, huevos y animales en Capital Federal. Todas las semanas el tren llevaba grandes cargamentos a los mercados de Abasto y Liniers.
El intercambio y los movimientos comerciales eran fluidos y regulares. El transporte ferroviario permitía cruzar distancias rápidamente y así, además de comercializar los productos de Biaus en ciudades, el pueblo se aprovisionaba de los bienes necesarios.
Los pobladores más antiguos de Biaus cuentan los grandes eventos y bailes que se realizaban allí, participando gran cantidad de jóvenes y personas de distintas edades. Cuentan que también asistían a los bailes -organizados en el club- pobladores de localidades vecinas. Se celebraban fiestas patrias con fuegos artificiales; se realizaban juegos de sortija, embolsados, piñata, carreras cuadreras. En palabras de Ramón de la Cruz Navarro “la gente de este populoso pueblo lucía sus mejores emprendados, con sus arreos, riendas, pretales y otros adornados con bombas, sortijas, verolas de plata, sus bastos con cabezales de oro y plata que ostentaban las letras de sus propietarios, también sus tiradores (…) adornados con monedas o patacones del mismo metal, todos estos jinetes montados en sus briosos y coscojeros caballos…”3. Se acostumbraba celebrar las fiestas de carnaval acompañadas de comparsas. El pueblo recibía una gran cantidad de visitantes todos los meses, atraídos por eventos y celebraciones. Eran frecuentes también los espectáculos musicales organizados en el Club Social, en donde participaban orquestas musicales, cantantes y personajes populares reconocidos, como por ejemplo; Roberto Rimoldi Fraga, Argentino Ledesma, Carlos Ramón Fernández, el actor Héctor Miranda, e incluso el plantel de fútbol de primera división del año 1959 de San Lorenzo de Almagro.
Rodolfo Gosto, un nativo de Biaus que reside en la ciudad de Chivilcoy, relata que en su adolescencia tuvo que migrar a Moquehuá para realizar sus estudios secundarios, mientras que sus padres permanecieron en Ramón Biaus. Su padre fue “carrero” y hoy en día, Rodolfo elabora réplicas de carruajes en miniatura, imitando a las carrozas existentes en Biaus, como así también en otros pueblos antiguamente.
El futuro que no llega
Como se mencionó anteriormente, en el año 1973/74 cierra el ferrocarril. Esa época estuvo caracterizada por un proceso general de cierre de ramales, perjudicando la comunicación y el acceso de distintos pueblos de la Provincia de Buenos Aires. Ramón Biaus no estuvo exento de este proceso y también sufrió las consecuencias de aislamiento. El mal estado de sus caminos, que conectan con las dos ciudades más cercanas (Chivilcoy y Moquehuá) impide compensar los daños causados por el corte de vías y acentúa sus dificultades de comunicación.
Perfil de la estación de tren
Hasta el día de hoy, los accesos al pueblo y a sus atractivos naturales – como al río Salado y a ciertos lagos- cercanos a este, continúan en mal estado. Esta situación generó grandes dificultades para el crecimiento del pueblo. Como el tránsito por los caminos depende del buen clima (cuando llueve es muy riesgoso conducir), se torna muy difícil llevar a cabo un alto nivel producción de bienes, servicios, y garantizar el aprovisionamiento regular en zonas externas al pueblo, así como también mantener relaciones comerciales estables y continuas. La consecuente inestabilidad comercial y laboral impulsó a gran cantidad de familias a migrar hacia las ciudades en busca de fuentes de trabajo.
Desde 1990 Ramón Biaus atraviesa un proceso de despoblamiento de aproximadamente el 50% de sus habitantes. El Censo Nacional de Población de 2001 contó allí 179 personas de manera estable, 91 hombres y 88 mujeres. Por un lado, los avances tecnológicos y los cambios en las maquinarias agrícolas fomentaron el crecimiento del área aumentando la escala de producción; por otro, volvieron prescindible una gran porción de la población abocada al trabajo de cosecha, siembra y secado manuales. Los campos circundantes al pueblo ya no son habitados por chacareros y sus familias. Los estancieros y empleados que trabajan en estas zonas llevan a cabo actividades rurales allí pero residen en las ciudades.
Perfil social
En líneas generales, los habitantes del pueblo rescatan la tranquilidad y seguridad existentes. Claudia, una de las habitantes nacidas allí, comenta que los niños en el pueblo pueden pasear y moverse libremente sin correr riesgos. En palabras de ella la juventud “acá tiene libertad, se mueven libres sin que la familia se preocupe por dónde están…”.
Durante el día hay grupos de niños caminando y jugando al aire libre, en las calles y predios del pueblo. El predio central es un espacio de recreación y esparcimiento para los más jóvenes. Allí hay juegos para los más chicos, además de amplio espacio para practicar deportes. Los adolescentes también hacen uso de dicho espacio como punto de reunión, antes de ir hacía otros pueblos o lugares.
Lo que más rescatan de Ramón Biaus sus habitantes es la tranquilidad, la unión y solidaridad existentes entre vecinos. Romina, una pobladora nativa, brinda su testimonio: “como somos todos muy unidos, si hay un problema tratamos de resolverlo nosotros y si no, hablamos con el delegado”.
Respecto a la formación de los habitantes, según lo observado durante el trabajo de campo y lo mencionado por su delegado municipal, el 80 % de la población tiene primaria completa y el 20% alcanzó la secundaria y estudios terciarios.
A su vez, la falta de fuentes de trabajo para las mujeres es un problema que afecta a las mismas desde la dimensión económica y social. A partir de observaciones de campo y según lo conversado con Graciela Agazzi, referente local, gran cantidad de mujeres poseen dificultades para pensarse a sí mismas como posibles protagonistas de emprendimientos. Según Graciela, muchas veces se debe a inhibición e inseguridad en llevar adelante proyectos fuera del entorno doméstico. Cuenta que tuvo un acercamiento a dicha situación, principalmente, durante la ejecución del proyecto de la panadería. Este negocio implicó una ruptura en los modos de vida de las mujeres que hoy trabajan allí, incentivando los potenciales de cada una de ellas.
Por otro lado, hay pocos adolescentes en el pueblo porque muchos se van a continuar sus estudios a Chivilcoy o a buscar ofertas de trabajo distintas a las que existen en el pueblo. Sin embargo, como la ciudad está a pocos kilómetros de Biaus, generalmente los jóvenes pasan los fines de semana en su pueblo.
Capacidad para autosustentarse
La fuente de trabajo más importante del pueblo es la fábrica de ladrillos. Emplea al 60% de la población de Biaus, por lo que varios pobladores sostienen que sin la fábrica el pueblo desaparecería definitivamente. La fábrica surgió como necesidad del pueblo en la época del ´49/´50. En ese entonces se presentaban dificultades económicas en la localidad y la centralización industrial en la Capital Federal atraía a jóvenes y a familias que dejaban sus trabajos rurales.
Ante esta situación, los habitantes recuerdan que uno de los referentes históricos del pueblo, Carlos Barraza, envió a Buenos Aires una pequeña porción de tierra para ser analizada. Como los resultados demostraron las excelentes propiedades para elaborar tejas, ladrillos y mosaicos, se decidió formar una sociedad entre las figuras dispuestas a reunir los capitales suficientes para establecer una fábrica en Biaus. La producción es de aproximadamente 15.000 unidades diarias.
Por otra parte, en el campo se encuentra trabajando el 15% y otros realizan “changas”, trabajan en comercios u oficios. Los principales oficios y profesiones existentes en el pueblo son: enfermeras; albañiles; panaderos; comerciantes; reposteras; maestras; empleado fabriles; peones de campo; chacareros; empleados municipales. Otros habitantes trabajan como alambradores; mecánicos y zapateros. Respecto a actividades secundarias basadas en los recursos de dicha zona, en líneas generales realizan dulces, comidas o elaboran indumentarias con tejidos para consumo personal. Una minoría produce para intercambio o venta a pequeña escala en el pueblo.
Según lo expresado por la mayoría de los habitantes, el principal obstáculo para el crecimiento del pueblo es la falta de acceso de asfalto desde Ramón Biaus hasta la ciudad de Chivilcoy o a la localidad de Moquehuá. Esto dificulta la logística y distribución de productos, así como también la implementación de proyectos, ya que en muchos casos su funcionamiento está condicionado al clima.
Además, los pobladores consideran como obstáculos las siguientes cuestiones: falta de infraestructura -como por ejemplo servicios de transporte y comunicaciones-; educación; falta de viviendas; mal funcionamiento del correo postal; falta de conocimientos para organizar un proyecto económico. En base a las encuestas realizadas, las principales mejoras que el pueblo necesita son: fuentes de trabajo para mujeres; escuela secundaria; caminos asfaltados; así como también unión para organizarse entre vecinos y actividades que atraigan a la juventud.
En líneas generales, los habitantes de Ramón Biaus concordaron en que – dejando de lado el factor fundamental del asfalto- lo más interesantes para desarrollar las potencialidades del pueblo, es conseguir un medio de transporte vía ferrocarril y, en segundo lugar, explotar el rubro turístico.
En tiempos pasados se intentó implementar un servicio interurbano de "mini-tren" (por medio de una combi que va por las vías ferroviarias) entre localidades de Ramón Biaus y Moquehuá, pero no logró el apoyo suficiente para su habilitación.
Como las vías del ferrocarril están en buen estado y los tramos, en su mayoría, están completos, no implicaría grandes gastos crear un circuito hasta Moquehuá. En cierto modo, esto compensaría las dificultades de comunicación y accesibilidad por la falta de asfalto de una manera más económica y rápida.
Dentro del área turística, Damián Zabala, hijo de Erilda, una mujer mayor habitante del pueblo, comentó que hace tiempo está interesado en construir hospedajes allí. La Estancia La Rica actualmente explota el turismo y, por la cercanía geográfica, Ramón Biaus podría ser parte de sus paquetes promocionados.
La inserción de Ramón Biaus en el turismo podría ser un buen camino para generar fuentes de trabajo para las mujeres, exponiendo los productos que realizan y/o ocupándose de las tareas necesarias para mantener la infraestructura.
En cuanto a la lista de oportunidades que los habitantes encuestados seleccionaron, las elegidas fueron:
Por último, existe un evento interesante para tener en cuenta. Este consiste en un encuentro de Cicloturistas de Chivilcoy, organizado por la Peña "19 de Diciembre" de dicha ciudad. En general, los ciclistas realizan el circuito Chivilcoy-Indacochea- Achupallas-Ramón Biaus. Sin embargo, como el pueblo de Biaus carece de infraestructura, los ciclistas recorren el pueblo rápidamente y siguen su viaje. En caso de desarrollar un proyecto turístico que brinde actividades y/o espacios para pasar el día, este encuentro podría atraer a visitantes.
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