POBLACION
El motivo de fundación de El Trapiche fue la instalación de un molino destinado a trabajar con más eficiencia el mineral aurífero extraído de la zona de Carolina. Se toma como fecha fundacional el 12 de diciembre de 1792, momento en el que se firma en la ciudad de San Luis la escritura de arrendamiento de un terreno situado en el entonces paraje Las Tapias, que los herederos de don José Sosa (dueño de éstas tierras) otorgaron a don José Rocha para la construcción de un trapiche. Se trataba de un molino destinado a moler minerales que era movido por fuerzas hidráulicas, posteriormente se agregó un molino para el trigo.
Pero la zona de El Trapiche había contado con población desde muchos años antes. Según asegura Reynaldo A. Pastor debió ser un importante núcleo aborigen. Así, los primeros habitantes de estas tierras habrían sido los Huarpes y Comechingones. Se han encontrado vestigios materiales de estas culturas en las zonas de Virorco, Barranquitas, Carolina, Río Grande y el Trapiche.
Morteros utilizados por la cultura huarpe
Restos del antiguo molino que dio el nombre al pueblo
Hasta la década del treinta existió un modesto trapiche para moler trigo y abastecer de harina a los vecinos de la campaña. En 1864 El Trapiche era asiento de una posta de línea de mensajería que iba de San Luis a Villa Dolores (actual Concarán), pasando por Cuchi Corral y Estancia Grande, El Trapiche, La Bajada, Paso del Rey, Inti Huasi, Agua Blanca, Laguna Larga, El Bajo San Bárbara (San Martín), Estancia, Los Alanices.
En 1890 abre sus puertas la escuela Nro. 135, que, a lo largo de los años, va trasladándose a distintos predios. En 1960 la escuela es renombrada como Gabriela Mistral Nro. 269 y en 1997 se unifica con la Escuela Secundaria EPEM Nº 5 abierto en 1987, formando el Centro Educativo Nro. 5 “Senador Alfredo Bertín”.
El 5 de diciembre de 1937 se comenzó a construir la parroquia que dependió de la Iglesia de Saladillo hasta el 11 de febrero de 1988, cuando Monseñor Laise funda la Parroquia Nuestra Señora del Rosario de El Trapiche.
Los primeros propietarios de las tierras de El Trapiche fueron europeos. Se destacan algunos antiguos habitantes como Marcial Rodríguez, quien trasladó en 1910 la antigua escuelita fundada en 1890 a una de sus propiedades y junto a Zoilo Toledo, Rumilda de Vendant y Rosa Esther Cendra fue considerado pionero en enseñanza; el doctor Ojeda, primer médico que se radicó en el pueblo; las familias Pastor, Migliozzi y Abdala, dueños de los molinos.
Las actividades económicas fueron mutando a lo largo de los años. En este pueblo que se fundó para la molienda del oro, luego tuvo una mayor importancia la molienda de trigo, luego cobró centralidad la actividad agrícola-ganadera y hoy en día el turismo constituye la fuente de ingresos más importante.
Hacia 1940 El Trapiche ya era considerado una villa veraniega y contaba con casas de fin de semana. Así, muchas familias de San Luis iban allí a pasar sus días de descanso en el ámbito rural.
Calles de El Trapiche hacia 1940
Multitud de personas frente a la Parroquia Nuestra Señora del Rosarios hacia 1946
El Trapiche cuenta con una población de 1200 habitantes (INDEC, 2010), lo que evidencia un crecimiento demográfico de casi el 20% en la última década, ya que en el 2001 la población era de 1006 habitantes (INDEC, 2001).
Según la información proporcionada por el INDEC, la población menor de 15 años constituye un 27,42 % del total, la población de 15 a 64 años el 62,08 % y la población mayor de 65 años el 10,5 % del total. La distribución por sexo es muy pareja, siendo un 51,33% varones y un 48,67% mujeres.
Perfil social
El grupo mayoritario de El Trapiche está dentro de lo que se considera como población económicamente activa. A partir de la encuesta realizada a los hogares se puede concluir que los índices indican que prácticamente no hay analfabetismo en este sector de la población y que el 23% posee los estudios secundarios completos, el 25% secundario incompleto y otro 25% primaria completa.
Casi el 30% de los habitantes posee menos de 15 años. El principal lugar de encuentro para los niños y jóvenes es la escuela, ya que si bien los más pequeños pueden realizar talleres de teatro, deportes u otras actividades recreativas en el salón de usos múltiples dependiente de la municipalidad, los pobladores indican que no hay demasiadas actividades destinadas a los adolescentes.
Gran cantidad de jóvenes, al finalizar la escuela secundaria comienzan sus estudios superiores en la ciudad de San Luis. Para esto, algunos se trasladan cotidianamente mientras que otros, si tienen posibilidades, eligen mudarse a la ciudad. La ausencia de canales de participación, de actividades sociales y deportivas, de posibilidades de educación y capacitación y la desmotivación general son señalados como problemas muy importantes por los jóvenes del pueblo.
El grupo minoritario de la población de El Trapiche es el de adultos mayores. El único espacio de encuentro con el que cuentan es el centro de jubilados. Allí se organizan caminatas, almuerzan diariamente, practican yoga, reciben masajes, servicios de pedicuría, y atención de una nutricionista y una médica una vez por semana.
Un grupo de alumnos de secundario llevan adelante como proyecto de una materia el dictado de clases de danza árabe
El Centro de Jubilados El Encuentro es el lugar de reunión de los adultos mayores
Capacidad para autosustentarse
La principal actividad económica de El Trapiche es el turismo, y esto se refleja en las encuestas realizadas al 12% de los hogares que indican que la mayoría de la población está empleada en actividades terciarias. También hay muchos pobladores ocupados en el empleo público: en la municipalidad o la docencia. El porcentaje de la población encuestada ocupado en actividades primarias e industriales es una minoría y un porcentaje considerable de los encuestados no trabaja.
La tasa de desocupación es del 3% de la población (INDEC, 2010). De acuerdo a la intendenta aproximadamente 60 personas reciben asistencia estatal: 40 reciben el Plan de Inclusión, dependiente del Gobierno de la Provincia de San Luis y 20 planes municipales como el Plan de Ayuda Social, becas escolares o ayuda para madres solteras.
La principal actividad económica de El Trapiche es el turismo, y esto se refleja en las encuestas realizadas al 12% de los hogares que indican que la mayoría de la población está empleada en actividades terciarias. También hay muchos pobladores ocupados en el empleo público: en la municipalidad o la docencia. El porcentaje de la población encuestada ocupado en actividades primarias e industriales es una minoría y un porcentaje considerable de los encuestados no trabaja.
El gráfico del “espíritu emprendedor” de El Trapiche muestra que el 9% de los pobladores son productores, el 7% son artesanos y que el 1% ofrece algún servicio, con lo cual el 17% de la población realiza alguna actividad emprendedora. El 60% de los emprendedores entrevistados considera que la actividad que realizan tiene mucho impacto en los ingresos del hogar y ninguno considera que el impacto sea nulo.
Al momento de realizarse este relevamiento (octubre 2013), el 34% de la población se encuentra bajo la línea de la pobreza, y un 7% bajo la línea de indigencia.
Evolución del pueblo
Una pobladora que ha vivido toda su vida en El Trapiche destaca que desde los años setenta hasta la actualidad los servicios e infraestructura han mejorado. Durante la década de 2000 se han construido varios puentes que conectan ambas márgenes del río.
En cuanto a los servicios, el pueblo cuenta con agua corriente, tendido de luz eléctrica (aunque hay cortes frecuentemente) y cloacas. El avance de las tecnologías también ha impactado en esta localidad que cuenta buena señal de telefonía móvil, televisión satelital y acceso a internet satelital gratuito a partir de un programa del gobierno de la provincia de San Luis.
En marzo de 2012 se abrió en El Trapiche una delegación del ANSES en la cual se puede recibir asesoramiento y gestionar algunos trámites.
Problemas que enfrentan
De acuerdo al relevamiento realizado, la ausencia de fuentes genuinas de trabajo es el problema más importante que enfrenta El Trapiche. Gran parte de la población tiene empleos relacionados con el turismo, pero la naturaleza estacional de esta actividad hace que sean trabajos temporarios y que en el invierno estén desempleados. En El Trapiche no hay ninguna industria, lo que reduce considerablemente las posibles fuentes de trabajo.
La falta de infraestructura y de servicios también son considerados por los pobladores como obstáculos para el desarrollo. En relación a este aspecto, en las encuestas realizadas se mencionaron recurrentemente como problemas importantes la falta de mantenimiento de las calles y caminos, la deficiencia del servicio del alumbrado y barrido, la frecuencia insuficiente en los meses de invierno de la recolección de basura y la inexistencia de una red de gas natural. Algunos encuestados también mencionaron como inconvenientes la poca frecuencia de los colectivos, el mal funcionamiento eventual de las cloacas y que no haya en el pueblo un lugar en donde pagar los impuestos y deban viajar hasta San Luis para hacerlo.
En cuanto a la atención de salud, el mayor problema mencionado es la falta de atención médica permanente, ya que el horario de atención es hasta las 16. Otro problema que preocupa a los pobladores es el alto grado de enfrentamientos políticos en época electoral.
Algunos de los proyectos en los que está trabajando la municipalidad y que están en vías de concretarse son el de contar con un basural en el que se realice reciclado y la implementación del programa Municipios y Comunidades Saludables.
Una de las preguntas efectuadas en las encuestas realizadas al 12% de las familias y en entrevistas realizadas a distintos actores claves era acerca de qué proyectos eran considerados importantes para el desarrollo del pueblo. Teniendo en cuenta los resultados, se puede inferir que a los pobladores les parece muy importante el desarrollo de todo tipo de proyectos. Aun así, el más mencionado es el recreativo, uno de los sueños de los pobladores es que existan una mayor cantidad de lugares de encuentro para todos los sectores de la población. Algunos mencionan que desearían que el pueblo contase con una plaza, ya que en cada barrio hay una pequeña plazoleta pero no hay una plaza grande como en otros poblados. Que exista una oferta más rica de actividades culturales, recreativas y deportivas y que haya un centro cultural también son proyectos que mencionan los pobladores como deseados.
Otros sueños tienen que ver con la generación de fuentes genuinas de trabajo. En este sentido, se mencionan la instalación de fábricas, la inversión en el desarrollo de infraestructura turística (construcción de un hotel, construcción de baños en la costanera, habilitación de un balneario), contar con una mayor cantidad de comercios y una oferta más amplia de restaurantes y bares, tanto para el turismo como para la población local.
