POBLACION

En el territorio que hoy ocupa el pueblo Barrancas habitaban los huarpes, eran agricultores y cazadores, sembraban maíz, quínoa y calabaza. Aprovechaban el agua de deshielo de los ríos de montaña para cultivar. El algarrobo era el alimento más importante de su dieta, con sus semillas molidas hacían harina para fabricar el pata, y también, una bebida alcohólica: la aloja. Hasta esta zona llegaron los incas y luego los españoles, desde el siglo XVII comenzaron a instalarse algunos misioneros para evangelizar con las doctrinas de la iglesia a los aborígenes. Allí se construyó, con mano de obra huarpe, la capilla colonial Nuestra Señora del Rosario, declarada monumento histórico y una de las más antiguas de Mendoza. Según Monseñor José A. Verdaguer en “Historia Eclesiástica de Cuyo”, ya en 1807 existía la capilla y el cementerio lindante.

El origen del nombre Barrancas nace debido a las estructuras que fueron formando a lo largo de miles de años las aguas que bajan de los ríos estacionales. La actividad económica principal ha sido tradicionalmente la producción vitivinícola y olivícola; el pueblo cuenta con numerosas parcelas cultivadas con excelentes viñedos y olivares. Además, allí se encuentran instaladas cuatro reconocidas bodegas: Toso, Flichman, Agostino y Federico de Alvear, que emplean a familias de la zona. Maipú es reconocida por ser una de las mejores regiones para cultivar la variedad malbec.

Los memoriosos del pueblo consideran que los años de mayor esplendor en Barrancas fueron las décadas del 40 y del  50, años de mucho trabajo en los viñedos, había numerosos pequeños productores y las bodegas pagaban bien la uva. “Una familia podía vivir cómodamente con unas pocas hectáreas de viñedos”. En aquella época, lo que no se tenía, se lograba con el esfuerzo de los vecinos.

Luego, las bodegas comenzaron a tener sus propias plantaciones de viñedos, aumentó la producción, se comenzó a pagar poco la uva y los costos de la cosecha subieron. Los intermediarios acrecentaron sus ganancias. Esta situación generó que algunos pequeños productores se asociaran en cooperativas que no siempre funcionaron de manera adecuada.

Los memoriosos del pueblo: Carlos Mazoca (76 años), Gaspar Di Marco (88 años), Eugenio Mercuri (83) y Pedro Orosco (69 años)

La población de Barrancas según datos del Censo 2001 es de 2.992 habitantes. Se observa una considerable diferencia con los datos relevados en el Censo 2010 que dan como resultado 194 habitantes. Desde el área de estadística de la Municipalidad de Maipú se nos informó que la diferencia se debe a que en el Censo 2010 se tomó una fracción censal que no respeta los límites de la localidad, y que en consecuencia, el número relevado es menor.

Perfil social

En relación a la educación, según la encuesta realizada al 2% de los hogares, no se registraron personas sin escolaridad, de los mayores de 18 años, un 19% de personas no culminaron sus estudios primarios y un 16% no finalizó los estudios secundarios. Además hay un 31% que finalizó sus estudios secundarios, y un 9% posee nivel terciario o universitario incompleto.

Si bien la ciudad de Maipú ofrece diferentes posibilidades de estudios, son pocos los jóvenes que continúan estudios más avanzados, varias personas en el pueblo observan una gran desmotivación entre los jóvenes. Entre los que se quedan algunos consiguen trabajos en las bodegas o en trabajos rurales en las viñas u olivares, aunque por periodos estacionales. Los jóvenes cuentan con pocas actividades recreativas o centros de reunión. Esta última situación se repite entre los adultos mayores, ya que no cuentan con espacios de reunión o esparcimiento.

En relación al acceso a los servicios de comunicación, un 92% de los hogares encuestados poseen televisión por cable, un 100% cuenta con telefonía celular, un 23% con teléfono fijo, el 100 % posee radio, un 46% cuenta con acceso a internet y un 62% accede a diarios y revistas.

Cohesión social

Más de diez familias se encuentran participando en el programa Banco Popular de la Buena Fe, dependiente del Ministerio de Desarrollo Social de la Nación, y con el apoyo territorial de la agrupación Tierra Nueva de Maipú. Los Bancos de la Buena Fe impulsan la asistencia financiera a través de la modalidad del microcrédito, destinado a individuos o grupos familiares con iniciativas originadas en la autogestión, que formen parte de un proyecto que puede ser productivo, de reventa o comercial y de servicio. Se reúnen una vez por semana en la unión vecinal.

Además, desde la escuela secundaria “Huarpes de las Barrancas” se está trabajando en un proyecto arqueológico junto al equipo de Geo-Arqueología de la Facultad de Filosofía y Letras de la UNCUYO e investigadores del CONICET. Este proyecto está orientado a generar instancias de formación y capacitación en gestión de bienes patrimoniales culturales, para jóvenes y adultos del distrito de Barrancas Maipú, dando paso a prácticas de arqueología comunitaria.

Por último, desde el área de cultura, turismo y patrimonio de la municipalidad de Maipú se ha trabajado en el proyecto para la recuperación de la capilla Nuestra Señora del Rosario que fue declarada monumento histórico nacional en 1972. El proyecto de revalorización, incluyó el mejoramiento de la capilla, la confección de cartelería explicativa y la realización de un camino peatonal para unir los puntos de la plaza, la capilla y el cementerio.

Capacidad para autosustentarse

La zona sur de Maipú, está integrada por Barrancas, Cruz de Piedra, Lunlunta y Russel. Estos distritos son productores de materia prima, con un importante desarrollo de la agricultura, especialmente la vid, los olivos, frutas y hortalizas.

 

Según los resultados del análisis de las encuesta realizadas al 2% de los hogares reflejan que en relación alempleo por sector, un 13% se emplea en actividades terciarias como comercio y servicios, un 14% trabaja en empleos públicos principalmente docencia y empleos municipales, un 19% de la población se emplea en el sector primario, principalmente en actividades ligadas a la agricultura de vid y olivos, y un 16% en el sector secundario. Entre las personas que no trabajan hay un 6% de jubilados, un 22% de amas de casa, un 3% que realiza changas principalmente en tareas agrícolas. Se registró un 9% de desocupados.

En cuanto al espíritu emprendedor del pueblo, solo un 12% ofrece un servicio. Del total de emprendedores, un 83% son mujeres. El impacto que esta actividad genera en los ingresos es muy escaso, algunas de las dificultades que enfrentan son: falta de espacio físico acorde a la actividad y de acceso a los mercados. El promedio de los ingresos por hogar, es de $4826 y el ingreso per cápita es de $1475, situando a la totalidad de los hogares encuestados por sobre la línea de pobreza.

Entre las familias que producen algún tipo de alimento, un 23% producen frutas como vid y durazno, de los cuales el 15% destina la producción a la venta. Un 8% poseen huertas donde cultivan principalmente tomate, lechuga, acelga, maíz y zapallo. Solo un  8% posee gallineros para producción de huevos para consumo familiar.

Raúl y Juana comenzando a podar los viñedos

Pedro Orosco nos muestra cómo se transporta la cosecha de uva

Evolución del pueblo

El pueblo ha mejorado en materia de educación, provisión de agua y luz, accesos a internet, mayor frecuencia de transporte público. Además se está ampliando el centro de salud del Alto, situación que mejorará la atención, ya que se construirán dos consultorios más. Se ha mejorado la plaza y la capilla y se ha realizado una senda peatonal con cartelería para el visitante.

En otros aspectos, el pueblo se mantiene sin cambios como en sus calles de tierra y ripio, la falta de cloacas y la ausencia de la red de gas, aunque esta obra ha sido prometida para el año 2014. La oferta de comercios sigue siendo muy escasa, en especial del rubro de la gastronomía y servicios de hospedaje.

Problemas que enfrentan

Las principales problemáticas que identificaron los vecinos, como obstaculizadores del desarrollo del pueblo fueron, en primer lugar, la falta de servicios e infraestructura (falta de red de gas, cloacas, estación de servicio, asfalto de caminos y falta de viviendas). En segundo lugar, la ausencia de fuentes genuinas de trabajo, ya que hay períodos de año en que hay mucha demanda de trabajo, pero el mismo es estacional,  para la época de cosecha de la vid o los olivos. Por otro lado, varias personas han señalado la falta de actividades recreativas para jóvenes y adultos. 

Uno de los proyectos que los vecinos esperan que se realice este año 2014 es la creación de la red de gas que, en una primera etapa, llegará a 250 hogares. El control técnico lo realizará Ecogas y la inversión corresponde al plan de obras 2014.

Durante el trabajo de relevamiento en el pueblo se realizaron entrevistas a informantes claves y encuestas al 2% de los hogares. A todos se les preguntó acerca de cuáles serían los proyectos que impulsarían el crecimiento de la comunidad. Los vecinos consideraron como primordial obras en infraestructura, como el asfaltado de algunas calles del pueblo, ya que en época de lluvias se hace muy difícil transitar por las calles y en época de seca vuela mucha tierra.

También se mencionó la ampliación de la red de gas natural, debido a que en invierno muchas veces escasean las garrafas o sube mucho su precio. La falta de fuentes de trabajo permanentes y capacitación en oficios para los jóvenes es un tema importante, como también, se mencionó la necesidad de contar con actividades recreativas para jóvenes y adultos.