POBLACION

Los primeros habitantes de estas tierras fueron los indios pampas, “Pampa" (en quechua "campo"), fue el gentilicio que le dieron los españoles a las comunidades que habitaban en la llanura. "Puelche" ("gente del este"), es el nombre que utilizaban los mapuches para nombrar a las comunidades que habitaban esa geografía. Hacia 1825 comienzan a llegar los grupos Vorogas, parcialidad  mapuche que se asentaron en la zona de Salinas Grandes (La Pampa), Guaminí y Carhué (Buenos Aires).[1]

En 1872 se produce la batalla de San Carlos muy cerca de la actual ciudad de Bolívar, allí se enfrentan las fuerzas del cacique mapuche Juan Calfucurá, jefe de la Confederación de las Salinas Grandes y el ejército argentino al mando del general Rivas. Calfucurá es derrotado y comienza el fin del poderío indígena. Luego las tierras son repartidas entre los vencedores, muchas fueron adquiridas por grandes terratenientes que luego arrendan o venden pequeñas parcelas.

Fue así como entre los años 1896 y 1898 llegan, procedentes de 9 de julio, unos de los primeros colonos: los hermanos Ormaechea, que arrendan treinta leguas de campo e instalan la primera casa de ramos generales llamada “El calzoncillo”. Comienzan a asentarse varios inmigrantes procedentes principalmente de España e Italia. En 1899 con el extendido del ramal de Bolívar a Guaminí, se inaugura la estación del Ferrocarril Sud, frente a la estancia Cume-có. Este hecho fue decisivo para el nacimiento del pueblo, ya que a su alrededor comienzan a agruparse numerosas viviendas y comercios. La casa de Ormaechea se muda al este de la estación, muy cerca funcionaba la fonda de don Manuel Urcullu y la panadería “La Primera” de Don Lozano. Luego del incendio de la casa Ormaechea se crean las casas “Roteta y Tamborenea” y “Diez y Fernández”, propiedad de los antiguos empleados de la famosa tienda.

Fue Rodolfo Pirovano quien donó los terrenos para la construcción de la estación ferroviaria y quien decide la fundación del pueblo en honor a su padre, el reconocido médico cirujano Ignacio Pirovano. La fundación oficial se produjo el 20 de octubre de 1913, cuando es dado a conocer el decreto firmado por el gobernador de la provincia de Buenos Aires.

Los primeros colonos, en su mayoría inmigrantes de origen español e italiano, arrendaron pequeñas chacras donde se dedicaban a las actividades agrícolas y ganaderas. Los principales cultivos eran el trigo y el maíz de los cuales se obtenían muy buenos rindes. Además las grandes estancias de la zona, como Cume-có, La Celina y San Carlos empleaban a gran cantidad de personal. A modo de ejemplo, la estancia Cume-có llegó a tener un centenar de empleados.

El pueblo siguió creciendo y según nos cuenta Diego Carón, vecino memorioso del pueblo, entre los años 1960 - 1970 fue el período de mayor esplendor de Pirovano; el campo estaba en su apogeo, había mucho trabajo, la población creció a casi 4.000 habitantes; había cine, boliche, hoteles, cinco equipos de futbol y funcionaban los dos clubes. Había muchos comercios y la cooperativa agrícola trabajaba a toda máquina.

A partir de 1980 comienza a decaer el empleo rural, varios factores influyen en esta situación: las extensiones de tierras son subdivididas entre las sucesivas generaciones, resultando muy poco rentable trabajar pequeñas fracciones, muchas optan por vender su parte e irse a trabajar a las grandes ciudades. Por otro lado la fuerte mecanización de las tareas agrícolas y la presencia de los pool de siembra, fueron unas de  las causantes principales de la drástica disminución del empleo en el sector. Como corolario de los casi diez años de inundación (de 1985 a 1995), en que casi el 70% de los campos quedaron bajo el agua, numerosos chacareros se endeudaron y familias enteras partieron a grandes ciudades como Mar del Plata, Buenos Aires y Olavarría en busca de trabajo. 

Pirovano cuenta con 1.551 habitantes (censo 2010), lo que representa un leve incremento del 1% frente a los 1.536 habitantes  del censo anterior (2001).

 

[1] Grupos pre-araucanos (Het). Clasificación de Thomas Falkner.

 

 

  

 

 

La población

Según los datos del censo 2010, Pirovano cuenta con una población de 1.551 habitantes. De los cuales 757 son mujeres y 794 hombres. En cuanto a los grupos etarios, un 21,4 % corresponde a las edades de 0 a 14 años; un 58% a los de 15 a 64 años y un 20% a las personas de 65 años y más ( INDEC censo 2010).

 

  

 

Perfil social

Todos los niños en edad escolar asisten a la escuela primaria y en algunos casos, a contra turno, concurren al centro educativo complementario. Desde el año 1984 los estudiantes que culminan el primario pueden cursar sus estudios secundarios en el pueblo.

Según lo analizado en las encuestas realizadas al 2% de los hogares observamos que, de los mayores de 18 años, un 24% no culminó sus estudios primarios. Esta situación suele darse en los adultos mayores de 65 años, ya que en aquellas épocas (según relatos de vecinos del pueblo) muchas familias vivían y trabajaban en el campo, por lo que era difícil que mantengan a sus hijos en la escuela; los niños solían cursar solo hasta tercer grado para que aprendieran a leer y escribir.

En relación al nivel educativo alcanzado, vemos que del 77% que completó sus estudios primarios, un 24% realizó hasta el nivel secundario, de los cuales un 12% no los completó. Además un 24% realizó estudios terciarios o universitarios de los cuales un 12% los finalizó.

A diferencia de sus padres y abuelos, hoy los jóvenes en más de un 80% finalizan sus estudios secundarios y migran hacia otras ciudades para continuar estudios más avanzados o en busca de trabajo. Los jóvenes que se quedan, por lo general se emplean en tareas relacionadas con el sector agropecuario, realizando changas o trabajos informales. El panorama de las mujeres es aún más complicado, ya que muchas veces solo consiguen trabajo en el pueblo como empleada doméstica, atención de ancianos y en menor medida como empleadas de comercios.

Los jóvenes y adolescentes del pueblo cuentan con muy pocas actividades recreativas, lo cual es una demanda a ser atendida. Los adultos mayores de 65 años, viven una vida tranquila en el pueblo, cuentan con un centro de jubilados donde se realizan cenas y viajes.

Según los datos de las encuestas, un 40 % de los hogares entrevistados poseen internet, su frecuencia de uso  es de un promedio de cuatro horas por día. Las aplicaciones más utilizadas son, en primer lugar las redes sociales y los portales de noticias.

 

 

Cohesión social

Numerosas instituciones trabajan en proyectos que de alguna manera involucran a la comunidad, como la escuela secundaria con proyectos como la realización del periódico “Punto y Aparte”, la recopilación de historias de familias del pueblo para la realización de un programa emitido por el canal Pirovano, la realización de la “Fiesta del chorizo seco”. Además, desde la escuela primaria, el CEC, el hospital, la delegación, los clubes, el centro de adultos y la ONG Proyectar por los pueblos, siempre que se ha requerido el apoyo de la comunidad han tenido una respuesta favorable, aunque con mediana participación. Por otro lado es interesante rescatar el trabajo en red que realizan varias instituciones del pueblo.

 

Capacidad para autosustentarse 

En relación al empleo por sector, los resultados del análisis de las encuesta realizadas al 2% de los hogares reflejan que un 23% se emplea en actividades terciarias como comercio y servicios, un 18% trabaja en empleos públicos principalmente docencia y empleos municipales. Un 18% de la población se emplea en el sector primario, principalmente en actividades ligadas al sector agropecuario. Entre las personas que no trabajan hay un 29% de jubilados, un 6% de amas de casa, un 6% que realiza changas, principalmente en tareas agrícolas.

En relación al espíritu emprendedor del pueblo, un 18% elabora algún producto. El restante 82% no realiza ninguna de estas actividades. Del total de emprendedores, el 100% son mujeres. El impacto que esta actividad genera en los ingresos es alto y algunas de las dificultades que enfrentan son: falta de acceso al crédito, falta de espacio físico acorde a la actividad y de acceso a los mercados.

Solo un 10% de los hogares poseen un terreno al que destinan para algún uso productivo, principalmente producción de frutas como ciruela o membrillo, que destinan al consumo familiar.

El ingreso promedio de la población por cápita, dio como resultado que un 10% de los hogares se encuentran bajo la línea de pobreza (menos de $577,23 por mes por miembro del hogar) y el 90% de los hogares se encuentran sobre la línea de pobreza, con un ingreso promedio de $2335 por miembro del hogar.

 

 

 

Evolución del pueblo 

Los resultados de las encuestas a informantes claves, en relación a la evolución en infraestructura y servicios del pueblo, muestran un avance en materia de educación, salud, provisión de agua y luz, telefonía y acceso a internet. No obstante otros servicios han empeorado, como por ejemplo el transporte público, ya que los colectivos cuentan con menos frecuencias que hace unos años, y ha cesado el paso del ferrocarril que iba y volvía a Buenos Aires en el día, conectando ciudades vecinas; este servicio era muy utilizado por los vecinos del pueblo. Además, la oferta de comercios y sobre todo la variedad de rubros ha disminuido.

 

 

Problemas que enfrentan 

Los principales problemas que fueron identificados por los vecinos fueron, en primer lugar la falta de fuentes genuinas de trabajo, ya que es una de las causas principales por las que muchas personas abandonan el pueblo. En segundo lugar, los vecinos consideran la falta de infraestructura y servicios, reflejada en la carencia de una red de gas natural, la falta de pavimentación de las calles y la necesidad de construcción de viviendas.

 

 

Proyectos no concretados

Uno de los proyectos aún no concretados, que posiblemente se realice este año (2014), es la creación de diez viviendas que contarán con mano de obra del pueblo.

 

Durante el trabajo de relevamiento en el pueblo, se realizaron entrevistas a informantes claves y encuestas al 2% de los hogares, a todos se les preguntó acerca de cuáles serían los proyectos que impulsarían el crecimiento de la comunidad. Los vecinos consideraron como primordial el acceso a la red de gas natural y la pavimentación de las calles. Además mencionaron la necesidad de promover emprendimientos productivos que generen trabajo, para que los jóvenes no deban abandonar el pueblo. También se mencionó la necesidad de contar con actividades recreativas para jóvenes y adolescentes.